lunes, 29 de diciembre de 2014

Síndrome de Goodpasture

¡Buenos días a todos! Hoy hablaremos entre otros, del síndrome de Goodpasture. De nuevo estamos ante una enfermedad rara que tiene una incidencia estimada en 0,1 casos por cada millón de habitantes, una de las enfermedades con menos incidencias de las que hemos visto en el blog. Además, es importante saber que afecta en mayor proporción a hombres que a mujeres.

Siendo tan poco frecuente, quizás no habréis oído hablar de ella ni de sus casos ni de sus síntomas, y por ello, los vamos a explicar aquí.

Esta enfermedad es del grupo de las enfermedades autoinmunitarias, es decir, que el propio sistema inmunitario de la persona va a ser atacado a sí mismo por equivocación, destruyendo tejidos corporales que se encontraban en perfecto estado. Concretamente, esta enfermedad va a comprometer a los riñones y a los pulmones, produciéndose insuficiencia renal que evolucionará de manera rápida y enfermedad pulmonar.

Fuente: www.epainassist.com
Os preguntaréis también de qué forma se produce ese ataque del sistema inmunitario. Es un proceso un poco complejo, y aquí vamos a tratar de explicarlo de manera "fácil y simple". Digamos que las personas que tengan el síndrome de Goodpasture van a producir unas sustancias (anticuerpos antimembrana basal glomerular) que van a atacar al colágeno, que como quizá ya sabéis, es una proteína. Así van a destruirse partes de los riñones y los pulmones, que como dijimos eran las estructuras afectadas, y pueden producirse sangrados e inflamaciones.

Fuente: www.autoimmunediseases.wikispaces.com
Algunos de los síntomas que se pueden producir son la debilidad generalizada y el cansancio. Pero además, se pueden ver más signos como tos con sangre, derivada del sangrado de los sacos pulmonares, o problemas para respirar, disnea... Con respecto a los problemas renales se pueden presentar signos como orina con sangre, náuseas o vómitos...

Para poder diagnosticar este síndrome, se recurrirá a diversas pruebas, algunas de ellas pueden ser análisis de sangre u orina, exploración de los ruidos pulmonares, gasometrías arteriales o biopsias tanto pulmonares como del riñón.

El tratamiento principal estará centrado en eliminar las sustancias dañinas que comentábamos, las que atacaban al colágeno. Esto se hace mediante la plasmaféresis.

Sin embargo, también pueden sugerirle a la persona que padece el síndrome algunas recomendaciones como controlar la dieta o la presión arterial. Otras alternativas que también podrían valorarse dependiendo de lo afectada que esté la persona y de en que estructuras tenga mayor problema, podrían ser un trasplante de riñón o la diálisis.

A continuación, os dejo un enlace que os llevará a un documento de varios autores donde explican de forma un poco más concreta en qué consiste este síndrome:

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